Equipaje para una semana

Se acercan las vacaciones de Semana Santa y seguro que muchos de vosotros ya estáis visualizando vuestro viaje con los millones de cosas que os apetece llevar. Ese es el momento maravilloso en el que planificas, te imaginas en el destino disfrutando de tus días libres aprovechando para descansar y desconectar o para llenar de actividad los bien merecidos días que os esperan.

Sin embargo, todavía te queda el previo: hacer el equipaje. Recuperar las maletas del trastero y llenarlas de ropa y otros elementos accesorios, o no, mientras tienes la sensación de que se estrechan cuando las vas a llenar. Tú siempre puedes viajar con cuatro cosas (o eso le dices a tu marido) pero es que los niños necesitan tanto…..

Nosotros somos super viajeros y estamos acostumbradísimos a montar y desmontar maletas. No puedo decir que seamos rápidos  y eso que sólo somos cuatro, no quiero pensar en familias numerosas, pero sí que somos metódicos.

Os cuento nuestra forma de hacerlo por si os puede hacer un poco más amena la tarea.

En mi familia somos muuuuuuuuy amigos de las listas. Hacemos listas de compra, listas de pros y contras, listas de Reyes, listas de invitados para las fiestas de cumple infantiles, listas de materiales para un proyecto handmade, listas de tareas diarias y por supuesto listas para las necesidades de cada uno de nosotros en un viaje.

Para hacer la lista de la ropa contamos cuántos días estaremos fuera, a priori. Si vamos a estar más de una semana, consideramos 7 días contando con que tengamos posibilidad de lavar en destino, claro. Hacemos conjuntos combinables en los que hay prendas que se pueden repetir (si tienes suerte de no manchártela el primer día que la usas). Por ejemplo, si has combinado un vaquero, con una camiseta y una chaqueta de punto, puedes contar con esa chaqueta para una segunda puesta y quizás el vaquero también, que podrás combinar otro día con una blusa y un jersey. Todo depende de la actividad y el tiempo de uso. Hay que contar siempre con un conjunto extra por si acaso.

Si viajas con bebés debes tener en cuenta que se manchan al menos el doble que un adulto así que considera unos 10 días para hacer los cálculos y no te olvides de llevar un botecito de jabón para ropa porque seguro que vas a tener que lavar algo. Cuando mis hijas eran bebés, teníamos una lista estándar de imprescindibles que siempre antes de una salida había que revisar: documentación del médico, crema solar, antipirético, gorrito para el sol, …. Ya no me acuerdo, pero nos venía fenomenal tenerlo escrito para no tener que pensar mucho más.

Cuando la lista está terminada y ya hemos incluido en ella los artículos de aseo, los de entretenimiento y los dispositivos electrónicos con todos sus accesorios, nos disponemos a buscar todo lo enumerado y ponerlo sobre la cama. Así nos hacemos idea del volumen y de cómo agruparlo. Al principio nos impresionaba ver el montón de cosas pero ya estamos hechos y nada nos asusta. Mi marido y yo antes de tener hijas, ya éramos de mucho equipaje así que no ha cambiado mucho el cuento. Ya sabéis, los “porsiacasos”.

Ahora viene el momento crucial. Hay que tener en cuenta si viajáis en coche o si vais en cualquier otro medio de transporte porque hay una diferencia abismal. Nuestro equipaje no tiene nada que ver si vamos en avión que si vamos en nuestro coche. No sólo cambia la cantidad de cosas que puedes llevar sino el modo de “empaquetarlas”. En el tren o el avión lo mejor es que lleves la menor cantidad de unidades posibles para evitar extraviar alguna, así que mejor un maletón (siempre que te hagas con él) que no ocho bolsos medianos, que sí son ideales para el coche porque las acoplas mejor en los huequitos del maletero.

Cuando ya tienes todo montado es cuando viene tu hija y te dice que en lugar del peluche del oso prefiere dormir con la jirafa y te rompe todos los esquemas porque el cuello estilizado de la jirafa no ocupa el volumen del oso regordete y te queda un hueco desaprovechado en la maleta mientras la cremallera no cierra porque a la jirafa se le salen las orejas fuera. Pero esto ¡¡forma parte de la diversión de hacer el equipaje!!!

Imprescindibles:

Nosotros NUNCA viajamos sin entretenimiento para las enanas durante los desplazamientos, ya sean en avión, tren, coche, barco o cohete espacial. A ellas se les hace mucho más ameno el trayecto, pero os puedo asegurar que a vosotros también. Si tenéis posibilidad de llevar algo para jugar todos a la vez, será una experiencia mucho más enriquecedora, pero si la disposición de asientos o la atención al viaje no os lo permiten, ellos agradecerán tener algo que hacer para acortar su sensación de tiempo de viaje. Puede ser un juego de cartas, un puzzle de viaje, un cuaderno de dibujo con pinturas (que no sean rotuladores o bolígrafos y a ser posible no cilíndricos para evitar que rueden por debajo de los asientos), cuentos, muñecos de bolsillo y un par de accesorios, un juego de memoria…

Un truco al que se puede recurrir también es llevar unas patatas fritas o algo rápido que les guste comer y ocupe poco. Les distraerá también un rato y les hará más llevadero algunos momentos del viaje como el despegue o aterrizaje del avión o la espera de la salida del tren.

¡Qué ganas de vacaciones! Yo me pongo con la lista ya, ¿y vosotros?

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